Wednesday, October 11, 2006

COSAS DE FRAN

Esta nueva temporada blogera tengo intención de contaros esas anésdotas que dan vidilla a mi estresada vida pofesional. Porque tela lo que acontece en los institutos públicos, aunque sean de pueblo como el mio. Supongo que mi Fran será protagonista de muchas de ellas, así que os presentaré al muchacho: MI Fran lleva el posesivo delante porque está claro en este mi instituto que Fran es asunto de Esther. Animalito (yo). Fran es un chaval de Casavieja diagnosticado de TDA/H, osá, Hiperactividad. A sus quince añitos ese diagnóstico es el menor de sus problemas y de los nuestros. Fran es una bomba de relojería: los profes ruegan por la mañana que si su madre se ha acordado de darle la medicación por lo menos se quede dormido en clase. Porque si no, las monta, y cuando digo monta hablo de montajes más duros que los de Pipi y la Bermúdez. Sus víctimas preferidas son las profesoras novatas. Ayer me lo mandaron a Jefatura porque en plena clase de Sociales abrió las ventanas de par en par y gritó:¡Me voy a fumar un porro que te cagas!. otras veces nos canta por Estopa mamente. Afortunadamente ya no usa los extintores para agredir a las conserjes, ni arrea, ni roba. El año pasado conseguí domesticarlo y ahora nos queremos.
Lógicamente, Fran no aguanta 6 horas seguidas de clase en las que ni entiende ni le interesa nada de lo que se cuenta. Así que le tengo entrenado para que cuando note que le va a dar el siroco, saque su cuaderno y dibuje lo suyo: coches tuning. Y suele llegar con tres o cuatro modelos tan orgulloso él. Ahora que el último...me impacto, ñoras y ñores. Porque mi Fran nos tuneó un coche de muertos. Tal y como podéis ver ejcaneao con mi maravillosa impresora multifunción casi obsequio de "El Pais". De paso aprovechamos para escribir un relatillo con sus compas de apoyo Mónica y Sergio, esos Santos. Os lo transcribo:
"Un entierro movidito"
Había una vez, en un pueblo que se llamaba Villayantas de Aleación, un hombre llamado Tio Pancho Chorizo que era un viejecito al que un día le ocurrió una desgracia: que fue atropellado por un triciclo tuneado. Antes de fallecer dijo que le llevaran en un coche fúnebre tuneado y que sonara la música del famoso pincha DJ Japo. le cumplieron las órdenes tal y como lo dijo. El día de su entierro la gente iba detrás del coche bailando bakalao con mucha marcha. Cuando legaron al cementerio sacaron el ataúd y lo llevaron a hombros.En esas estaban cuando de repente se oyeron unos golpes que salían del interior del ataúd. Al oírlos soltaron la caja y salieron corriendo aterrorizados. la caja se hizo mil pedazos y de allí salió el Tio Pancho Chorizo más feliz que una perdiz y gritando:
-¿Qué pasa, Nen?
La gente se quedó con la boca abierta y dejó de bailar, pero cuando vieron la marcha del tio Pancho Chorizo la fiesta continuó y la noticia salió en todos los telediarios del mundo mundial.
¿A que es otro incunable?

2 comments:

fridwulfa said...

Juas juas juas. No puedo esperar al siguiente capítulo del Fran.

Hastaquemecomprenlosdelgoogle said...

Noragüena por tu segunda reentrée. Seguramente este Fran nos va a proporcionar unas risas y a ti algunos llantos.